PLAN DE CONVIVENCIA | Entrevista a FÉLIX LÓPEZ, Catedrático de Psicología

El pasado jueves, 27 de junio, a las 19:30 horas en el Aula nueva situada en la calle Oro, 8 (Edificio del Banco de Alimentos), Félix López Sánchez impartió la tercera conferencia del Plan de Convivencia de Villamayor, bajo el título “Las funciones de la familia y el problema de la disciplina”.

A través de este Plan de Convivencia, se quiere fomentar la formación a familias en diferentes campos de interés para la educación de los hijos. En esta ocasión, la conferencia se centró en el tema la familia y la disciplina, uno de los temas que mayor preocupa a los padres, especialmente a medida que sus hijos van creciendo y van formando su personalidad y forjando su futuro.

Para hablar sobre ello, Félix López, Catedrático de Psicología de la Sexualidad de la Universidad de Salamanca, fue el encargado de hablar sobre la disciplina y cómo deben afrontar las familias los cambios evolutivos de sus hijos.

Félix López ha impartido cursos en numerosas universidades españolas y latinoamericanas. Destaca por sus más de treinta años de investigación reconocidos y es Doctor Honoris Causa por la Universidad de San Marcos de Perú.

Sus líneas de trabajo preferentes son el desarrollo sexual, afectivo y social: desarrollo y programas de intervención. Cuenta con multitud de publicaciones y tiene numerosos artículos publicados en revistas nacionales e internacionales sobre sus campos de investigación.

Está jubilado pero más activo que nunca, ¿cómo ocupa su día a día?

Ahora mismo estudio y escribo, y esto lo compagino impartiendo clases en diferentes Universidades. Tengo más trabajo del que necesito. Debería trabajar un poquito menos.

Ha desempeñado numerosos cargos a lo largo de su carrera, ¿cuál recuerda con más cariño?

Para mí ser padre, pero eso no es un cargo sino una decisión. Yo de todos, el haber inaugurado la Comisión de Garantías que es una especie de defensor del pueblo en la universidad. Primero, porque exigen una mayoría del claustro para el nombramiento y ellos me nombraron; y luego porque te llegan ahí cualquier tipo de problemas que no han tenido solución y no está previsto. Si tuviera que elegir uno yo creo que elegiría ese.

¿Cuántos libros ha publicado? Destaque alguno especialmente.

No lo sé, y además si lo supiera, me daría vergüenza decírtelo. No los he contado porque me gusta escribir y ya está. Lo que he hecho así de mayor peso: La teoría del apego, que la introduje yo en España, el tema de la sexualidad por primera vez en la Universidad. Ahora, por ejemplo, he dedicado cinco años a hacer una propuesta de ética en las relaciones sexuales y amorosas, porque se ha convertido en un campo de vida.

Eres un gran investigador, ¿Cómo ves la situación de la investigación hoy en día?

Hay falta de medios, pero a veces lo que hay también es falta de planteamientos porque hay una cierta perversión. El profesorado (muchos de ellos, no quiero incluir a todos) prioriza el curriculum; es decir, investiga para tener curriculum. Yo creo que hay que investigar para solucionar problemas, para aumentar el conocimiento. Quizá sea una crítica un poco dura y simplista pero hay algo de eso. De hecho, hay una agencia nacional que ha dicho que en España hay mucha investigación pero mucha de ella con poca calidad. ¿Por qué? Porque la gente dice: si yo quiero progresar, tengo que publicar.

¿Qué supuso para usted ser Doctor Honoris Causa en la Universidad de San Marcos de Perú?

Fue una sorpresa, porque yo nunca he buscado ser Catedrático y mucho menos Doctor Honoris Causa, porque entre otras cosas, no creo mucho en esa figura. Creo que se ha desprestigiado. En cualquier caso, no me lo esperaba. Yo en la Universidad de San Marcos he impartido bastantes cursos de formación. Te voy a contar una anécdota: creo que soy el único Doctor Honoris Causa que ha ido en chaqueta, porque no me avisaron. Fue cuando iba a dar un curso.

Es uno de los expertos más importantes de España en Educación Sexual, ¿Cómo lo introduciría en la escuela?

Ya tenemos experiencias. Hay una experiencia en Canarias, que funcionó fenomenal. Están haciendo cosas por el norte de España, pero no está generalizado. Ningún gobierno se lo ha tomado verdaderamente en serio. Yo creo que la escuela se debe hacer una pregunta fundamental: ¿qué puede hacer la escuela además de enseñar conocimientos para que mejore la calidad de vida de las personas y de la comunidad? Puede hacer muchas cosas. Yo no pido una asignatura de educación sexual, yo pido una asignatura sobre calidad de vida y bienestar con módulos: de salud, de medio ambiente, de habilidades sociales y de educación sexual. Se puede hacer y además los padres, si tú trabajas bien, no vamos a tener ningún problema con ellos. De hecho, creo que podríamos contar con ellos.

¿Qué importancia tiene la disciplina en la educación de los hijos?

Muchísima. Mis padres fueron autoritarios benevolentes, quiero decir que sus valores eran los típicos del tiempo, pero luego me quisieron mucho. Tuve la suerte de venir a estudiar a colegios y les debo todo. Mi disciplina también fue gracias a mi infancia, en la cual yo trabajaba: cuidar vacas y ovejas, vender leche… Y luego también me ha venido muy bien el deporte. Me gusta mucho el futbol. Esto y la austeridad también son muy importante. Lo decían los discípulos de Sócrates: lo importante es tener menos necesidades, no tener muchas cosas.

¿Cree que han cambiado los valores de la familia en este siglo?

Los básicos, no. Yo creo que lo esencial no ha cambiado ni va a cambiar. Las relaciones de parentesco familiar tienen una fuerza extraordinaria a lo largo de toda la historia y lo van a seguir teniendo. Los antropólogos lo han tenido siempre claro. Basta con visitar un hospital y ver lo que sucede. Cuando uno tiene problemas realmente importantes. Basta también recordar todo el problema que hemos tenido en España con la crisis y el paro. ¿Quién ha sacado adelante a los parados? Las familias. Ahí tienes incluso a los abuelos con su pensión buena, mala o regular sustentando a su familia. Las redes de parentesco hay que tomárselas muy en serio, lo que pasa que luego puede haber diferentes tipos de familia, eso es parte de la biografía que cada uno quiera elegir. Eso sí, hay cambios más sustanciales ahora mismo: tenemos más libertad, como la ley del divorcio por ejemplo; en un mundo globalizado, la familia se dispersa. Pero la red familiar sigue teniendo mucha fuerza y desde luego, para un niño pequeño es vital. Para los niños pequeños, con el vínculo de apego aprender que hay personas en las que puedes confiar.

Felix López demostró en su charla cómo las familias y la disciplina no es un tema de actualidad, sino que ha sido y será un tema de relevancia siempre. La sociedad avanza y evoluciona, pero el vínculo de apego es algo que permanece. Porque no hay nada mejor y más valioso que pertenecer a una familia.

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