Más de 20 años de experiencia avalan a este bonito proyecto que comenzó su andadura 
en lo que se conoce ahora como la Escuela de Música. Hablamos de la Escuela Infantil “La casa de campo”, un lugar que ha acogido a numerosos niños y niñas de nuestro municipio, y de municipios vecinos. Actualmente, situada en la Urbanización Anantapur, cuenta con diversas aulas, aulas de uso múltiple e instalaciones exteriores. En esta ocasión, tuvimos el privilegio de poder hablar con Carmen, una de las coordinadoras que lleva en “La casa de campo” desde que se inauguró, y nos contó un poquito más sobre el centro infantil: “Llevamos 22 años. Comenzamos en lo que es la actual Escuela de Música, en 1995 y estuvimos hasta el 2003, y ese año ya nos cambiamos aquí. Ya tenemos trayectoria”.
Se trata de un Centro de Educación Infantil de Primer ciclo (0-3 años), homologado y autorizado por la Consejería de Educación, que cuenta con un personal especializado y titulado trabajando en la educación de los más pequeños de la casa. “Somos una guardería pero también nos encargamos de niños más mayores por las tardes. En vacaciones, hacemos talleres para niños escolarizados: Semana Santa, Navidad, días festivos…; y cuando tienen colegio, los vamos a recoger y se quedan aquí a comer y posteriormente hasta que los papás los vienen a recoger. Siempre tenemos actividades con mayores, a parte de la guardería”.
Ha sido este centro el que también ha pensado en aquellos que ya no son tan pequeños, pero necesitan estar entretenidos durante la temporada estival. Así, este campamento está destinado a niños y niñas escolarizados de 3 a 10 años. Carmen nos contaba: “Contamos con niños principalmente de Villamayor, aunque también vienen niños de Castellanos y Valverdón o Salamanca”. Para ellos, se ha creado el campamento Summer House, un lugar donde los niños aprenderán a disfrutar a través de diferentes actividades lúdicas, complementando el inglés curricular y añadiendo contenidos y metodologías mediante trabajos cooperativos en pequeños grupos. Su principal objetivo es desarrollar las competencias de los alumnos en lengua inglesa como herramienta de crecimiento personal e intelectual. “Estamos activos durante todo el verano, no cerramos en el mes de agosto, aunque cambiamos el horario. En julio cerramos a las 18:00h y en agosto, a las 16:00h, pero la apertura sigue siendo a las 7
:00 igualmente. Tenemos un horario muy amplio.”
En el campamento, los niños aprenden a disfrutar cocinando recetas simples, experimentando con todo tipo de cocina: “La cocina da muchísimo juego. Ha hecho cosas muy chulas. Han hecho pan, cocina fría, canapés, croissants, palmeras, madalenas… cosas frías y cosas en el horno.”
El número de niños del campamento va variando según las necesidades de cada familia: “Ha habido 25 niños. Esta quincena, hay 15. Van variando, porque como va por quincenas, depende de las necesidades de los papás”.
El campamento está pensando para ser distribuido por semanas, quincenas o meses según las necesidades de cada familia. Así, los niños han podido apuntarse para participar a última semana de junio (23 de junio – 1 julio) y la primera de septiembre (1 – 9 septiembre), la primera y segunda quincena de julio y agosto, o los meses completos. Este campamento cuenta con una jornada de 9:00 a 14:00 horas, contando con un servicio adicional y opcional de madrugadores de 7:00 a 9:00 de la mañana, y un servicio de comedor de 14:00 a 16:00.
En cuanto a las actividades que llevan a cabo, son muy variadas y todas ellas se realizan dentro del municipio: “Las actividades se realizan en el centro infantil, salvo la piscina que van a la piscina de aquí, de Villamayor; y el pádel, en el Campo de Golf”. A lo largo de la semana tienen una serie de actividades fijas, como son: inglés, con un total de 4 horas semanales; cocina, con 6 horas semanales; visita a la piscina, 2 días a la semana; y pádel, una actividad opcional que cuenta con 1 día a la semana. Asimismo, este campamento ha planteado un sinfín de actividades complementarias. Las más destacables son: huerto urbano, deportes como senderismo y mini tenis, juegos de agua, juegos tradicionales al aire libre, juegos de mesa, gymkanas, teatro, manualidades y una fiesta fin de quincena que se asemeja a la Color Race.
Por último, y no por ello menos importante, la organización del campamento es un aspecto a destacar. Así, cuentan con monitores de ocio y tiempo libre, además de dos chicos de prácticas. A su vez, si existe alguna necesidad las cuidadoras del centro infantil también colaboran y ayudan.
No cabe duda que el Summer House es un campamento que, además de ser muy completo por todos los servicios que ofrece, es el lugar idóneo para que los más peques de la casa disfruten aprendiendo nuevas habilidades diferentes a las que aprenden en las clases durante el año. Carmen quiso destacar lo más 
importante de este campamento: “Yo creo que los niños se lo pasan fenomenal. Es un lugar muy familiar y están con muy buen traro y se lo pasan muy bien. La mayoría son niños que los hemos tenido aquí, por lo que los conocemos. Se lo pasan genial”.
Con estas palabras terminamos una charla que nos enseñó y transmitió los valores que siguen en “La casa de campo” de Villamayor, un lugar donde los más pequeños disfrutan, aprenden, se divierten, pero sobre todo donde se sienten muy queridos y forman una gran familia. Porque ya lo decía San Juan Bosco, sacerdote, educador y escritor italiano del siglo XIX: “No basta amar a los niños, es preciso que ellos se den cuenta que son amados”.