Tomando un café con… YOLANDA MARTÍN, actriz protagonista de la pelicula «Namida»

Quizás a muchos os suene esta cara. Y es que solo hace un par de semanas que nos visitaba Yolanda para contarnos todas las cosas que hacían desde el AMPA del cole de su hijo. Pero no, hoy no viene a hablarnos la Yolanda mamá, sino la Yolanda actriz.DSC_0464

Nunca desistas de un sueño. Sólo trata de ver las señales que te lleven a él.” Esta cita de Paula Coelho, novelista, dramaturgo y letrista brasileño, sintetiza en unas pocas palabras todo lo que me ha contado Yolanda durante un café de apenas media hora.

Seguramente muchos de ustedes no sabían que entre los vecinos de nuestro querido Villamayor, se encontraba la actriz protagonista de una película presentada a los Premios Goya. Probablemente, muchos conocéis a la Yolanda risueña, alegre, agradable; esa Yolanda que siempre tiene una sonrisa, y que anda de acá para allá, metida en todo lo que se presenta e intentado ayudar y aportando todo lo que puede. Pero nunca se imaginaron que esa mujer de sonrisa infinita sea una actriz de los pies a la cabeza.

Afincada en Villamayor felizmente con su marido y su hijo, Yolanda se considera una mujer normal que vive día a día la rutina de ser madre, esposa y trabajadora, pero que tiene un hobby muy diferente a los que se suelen tener: la interpretación.

En primer lugar, y antes de entrar a hablar de la película, cuéntanos, ¿quién es Yolanda Martín, a qué se dedica, cuáles son sus hobbies…?

Yolanda Martín es una persona muy normal en su día a día. Trabajo en una empresa de comunicación digital, y luego, tengo la suerte de poder dedicarme a una de mis pasiones: ser actriz de teatro y de cine. Soy mamá de un niño y esposa; mi día a día es intentar conciliarlo todo dentro de los horarios locos que tenemos, y que sea lo más normal posible. En cuanto a mis aficiones, me encanta bailar, leer, y cocinar. Me encanta que venga mi familia y amigos a casa, sentarnos alrededor de la mesa y que la sobremesa se alargue; o también, me encanta ver una película infantil con mi hijo.

¿Cuál es tu relación con el municipio de Villamayor? ¿Cómo llegaste aquí?

Yo conocía Villamayor hace muchos años, a través de amigos que tengo aquí. Vine a conocer la Feria de la Piedra y me encantó. Antes de vivir aquí, todos los años que he podido he venido. Siempre habíamos hablado mi marido y yo, la idea de ir a vivir a un sitio tranquilo: un pueblo próximo a Salamanca. En parte también por el niño; cuando tienes un niño todo cambia un poco. Tenemos aquí amigos y pensamos que era buen sitio. Finalmente nos decidimos, vinimos, y la verdad que ha sido una de las mejores decisiones que hemos tomado porque estamos muy contentos. A parte de los amigos que ya teníamos, hemos hecho muchos más; el niño está encantado en su “cole”; el sitio que vivimos es precioso…Todo han sido ventajas. Estamos muy contentos.

¿Cómo surgió tu deseo por la actuación?

Si te tengo que decir la verdad, desde chiquitita siempre me llamó la atención. Te voy a contar algo: no recuerdo muy bien la fecha, pero fue en la década de los 70. Mi padre se dedicaba a la construcción y se convoco una huelga del sector, en la que participo una gran mayoría de trabajadores, juntándose en el Pabellón de La Alamedilla para reunirse y pasar las horas de huelga. Estaba completamente lleno y había un escenario donde diferentes personas actuaban o hablaban. Mi hermano Zósimo y yo estábamos jugando por ahí abajo. Y lo que recuerdo es que alguien desde arriba nos ha llamado y nos ha dicho: “¿Os atrevéis a cantar una canción?” y  pensé yo: ¡anda! ¿Y por qué no? Nos hemos subido los dos arriba, tú fíjate lo que es la inocencia, y cantamos los dos la canción de “Mi amigo Marco” de principio a fin. Yo recuerdo un aplauso muy grande de toda la gente que estaba allí y ver a mi familia llorar. Así que me ha llamado la atención desde pequeñita. Luego en el “cole”, ¿quién no ha hecho alguna obra de teatro o algo de eso? Después me hice mayor y me dediqué a otra cosa. Pero hace año y medio, vi por las redes sociales que un amigo mío, Roberto García Encinas, que es mi actual profesor de teatro, daba un taller de micro teatro en la Malhablada. Y de eso que dices: ¿por qué no? Y me apunté, hice aquel taller y se ha vuelto algo necesario en mi vida. Me enganchó de tal manera que no lo puedo dejar. Aquello fue de esas cosas que estás en casa, lo vi y con el dedo encima del ratón, pensé: ¿qué hago? Le doy o no le doy. Y le di. Un clic de ratón, se puede decir que ha cambiado mi vida porque ahora mismo es mi pasión.

“Namida” es la primera película de la joven directora salmantina, Alba Rollán, que versa sobre un drama sobre la vida cotidiana en una paDSC_0472reja con violencia de género. Con escaso presupuesto y mucha ilusión, la joven inició este proyecto y vio en Yolanda el personaje de “Paz”, la mujer protagonista de la historia.  Así, comenzaba para Yolanda una larga andadura de momentos muy duros, pero a la vez, muy satisfactorios.

¿En qué momento llega a tu vida “Namida? ¿Cómo y por qué te adjudican el papel protagonista?

Llega en un momento muy bonito porque estoy ilusionada con el teatro, y claro, cuando estás tan entusiasmada con algo y de repente llega algo no mejor, sino igual de bueno… Ahora mismo no puedo pedirle más.

En cuanto al papel, a través de un amigo, me enteré del casting y yo me presenté. Hice en la prueba lo que me pidieron y a los días me llamaron. Así de simple.

Para mí fue una sorpresa que me eligieran. Me llamaron hace un año, porque la película se rodó en diciembre. Fue en el puente de la Constitución, estábamos en casa mi hijo, mi marido y yo. Me suena el teléfono, lo cojo y me dicen: “¿Yolanda Martín?” y le digo sí, soy yo, y me dicen: “Mira, soy el productor de la película de la que hiciste el casting y queremos comunicarte que ha sido una de las actrices elegidas”… Imagínate en ese momento, cuando colgué el teléfono le dije a mi marido: “que me acaban de decir que me han cogido para hacer un papel en la peli”. Pero claro, yo en ese momento dije   ¿un papel? O sea, de todos los que puede haber. Hay muchos papeles dentro de la película, pero a mi me daba igual cualquiera, yo ya estaba encantada.

Quedamos un día, allí estábamos la directora, Alba Rollán , y Alejandro Cabrero, que es el productor y me dicen: “Yolanda hemos pensado en ti para hacer el papel protagonista femenino de la película”…Mira…, me quedé en blanco. Para mí fue como: ¿qué ha dicho? Pasaron los minutos, ellos me seguían hablando y yo ya iba diciendo: ¡madre mía! Un sueño cumplido… ¿Quién te lo va a decir? Me emociono al recordarlo…

Háblanos lo que puedas del largometraje, sabemos que trata el tema de la violencia de género.

Te puedo contar poquito, porque se va a estrenar ahora el día 8 de diciembre. Es un tema de violencia, es un tema duro. Es una película muy dura, la cual te hace reflexionar sobre muchas cosas.

Paz y Juan son un matrimonio aparentemente normal, pero que poco a poco las situaciones que viven nos desvelan un lado oculto.

En pocas palabras, una película impactante, que no va a dejar indiferente a nadie, por lo menos eso es lo que nos trasmitió la gente que fue a verla al preestreno que se hizo el dia 9 de junio en el Teatro Liceo. Te engancha desde el principio.

A mí como persona, te puedo asegurar que hay un antes y un después en mi vida. En la película me llamo Paz, mi vida no es como la de ella. Pero claro, cuando te dan un papel, cuando tienes que representar algo, tienes que aprenderte el texto, tienes que interiorizarlo, tienes que convertirte realmente en esa persona. Tienes que sentirte como ella si tú quieres hacerlo bien, y quieres que el espectador capte. Y es tan duro hacer algo así…

Yo que normalmente había trabajado comedia, fue un cambio muy duro. Pasas de claro, ¡qué bonito! Tú haces tu actuación, la gente se ríe, y qué bien todo. Pero ¡madre mía!, esto era muy distinto. Aún así, dentro de lo duro que ha sido ser Paz, ha sido un papel muy enriquecedor y una experiencia que me ha enseñado mucho, muchísimo.

¿Qué más te puedo decir de Namida? Yo es que solamente con el tema de violencia ya está todo dicho.

¿Ha sido difícil interpretar un papel que se enmarca dentro de la violencia de género?

Lo que te digo, meterte en ese papel, lo que implica… Por ejemplo, una de las cosas más difíciles: Paz es una esposa, es una madre. Yo soy mamá. Cómo viven los niños ese tipo de violencias… El ver cómo ellos lo sufren, a mí es lo que más me ha costado. Esas escenas con la niña, ver cómo sufren ellos… Muchas veces yo creo que los padres que están en esas situaciones, no son conscientes de que tienen un niño al lado, porque si lo fueran no harían algo así. Mal la pareja porque sufre mucho, pero los niños están totalmente indefensos. Ellos no tienen la culpa de nada, ni de lo que opinen ni lo que sientan sus padres. Son  también los grandes afectados.

DSC_0470A pesar de la dureza de las escenas y el tema de la violencia de género, Yolanda ha vivido con intensidad el rodaje y asegura, haber aprendido mucho de todos sus compañeros. Protagonizar esta película ha marcado un antes y un después en su vida, no solo a nivel profesional, sino personal.

Cuéntanos alguna anécdota o algo que no vas a olvidar del rodaje, o algo relacionado con el largometraje.

Del rodaje no voy a olvidar muchas cosas porque hay escenas durísimas. Hay determinadas escenas que no te puedo contar, pero que al ver la película, te das cuenta como público, que el actor que ha rodado esas escenas, no las va a poder olvidar fácilmente. Son escenas muy duras, por ejemplo lo que te contaba de la niña. La verdad que la directora ha tenido mucha mano con ella y le han evitado escenas fuertes. Ella hacía su grabación y después el equipo técnico y de montaje lo montaba todo para que ella no tuviera que ver ciertas cosas. Pero algunas sí que las ha visto porque estaba dentro de la escena. Yo, antes de empezar, siempre hablaba con la niña, con Lucía: “Lucía, cariño, ahora vas a ver que mamá va a hacer esto, le va a pasar esto… Tú tienes que pensar que esto es un juego. Estamos jugando”.  Yo la abrazaba… Y cuando se acababa la escena y la directora decía “corten”, yo iba directamente donde estaba la niña y le daba el mayor de los besos para intentar que ella lo viera todo como un juego.

¿Más anécdotas? La gente que me conoce y fue a ver el preestreno, cuando salimos y pregunte: ¿qué tal?,  ¿qué os ha parecido?… Esas caras me lo decían todo, por ejemplo, mis padres no me decían nada, se quedaron sin palabras. Mi madre me decía que tenía un nudo en el estómago y que no podía hablar. Mis amigos lloraban… Porque claro soy tan diferente a Paz…

Otra cosa que no me acordaba: las escenas duras, sobre todo una que te voy a comentar, la directora me tenía que llevar al límite. Yo tenía que llegar al límite del personaje y de mí misma. Pues claro tu empiezas, y la directora me decía: “¡más!”. Seguías aumentando, y la directora: “¡más!” y venga y venga… Hasta que ya pensé: como diga otra vez “¡más!”, me derrumbo. Cuando escuché: “¡corten!”, mira me tuve que salir de allí llorando y era como si toda mi energía se me fuera por las manos, por las piernas… Al límite.

También fue un momento divertido y entrañable, cuando el día del preestreno, en la fiesta que hubo después para todos los que asistieron, me pidieron el primer autógrafo. Después firme algunos más, al igual que mis compañeros, pero ese será especial para el resto de mi vida. Tengo la cara de la chica que me lo pidió, grabada en la memoria, la recordare siempre. Ese momento en el cual te pregunta: «¿Me firmas un autógrafo?» Es indescriptible…  compartí con esa persona unas palabras y nos reímos de la situación las dos.

Hay anécdotas muy buenas dentro del rodaje, pero no os las puedo contar porque desvelaría cosas de la trama…

¿Qué ha supuesto y qué te ha aportado protagonizar este papel en tu vida?

Como te dije antes, desde luego hay un antes y un después en mi vida. Primero, a nivel profesional, me ha enriquecido muchísimo porque era un mundo totalmente nuevo para mí, gracias a Alba la directora y Alejandro el productor, que confiaron en mi, he aprendido muchas cosas: veo el cine de otra manera que antes no veía. Presto atención a otras cosas. Me ha ayudado a reflexionar muchísimo sobre las cosas que pasan… Mira, estoy en contra de toda la violencia a cualquier persona y de cualquier raza porque me parece que es algo que al ser humano nos quita todo lo de humano. Si tenemos alguna razón, en ese momento la hemos perdido toda. Por desgracia, pones las noticias y está tan a la orden del día…DSC_0468

Después del preestreno realizado en junio, será el próximo jueves, 8 de diciembre cuando los espectadores puedan ver en la gran pantalla la película. “Namida” será estrenada en Béjar y tiene previsto ser proyectada en la capital salmantina y otras ciudades de la geografía española. Además, el largometraje de 130 minutos de duración, ha sido presentado a los premios Goya, algo inimaginable para todo el equipo y que hace aún más grande, si cabe, este gran proyecto.

El próximo, 8 de diciembre se estrena en Béjar la película, ¿qué sientes al verte en la gran pantalla?

Emoción. Emoción porque echas la vista atrás y piensas: “¿pero quién me lo iba a decir a mi hace dos años?”. Respeto por el trabajo de todo el equipo. Preocupación porque somos nuestros peores críticos, siempre piensas que podías haberlo hecho mejor. Y mucha felicidad. Yo represento un papel, es muy duro, pero claro como Yolanda, muchísima felicidad. Estoy muy orgullosa y muy feliz que es lo  importante.

La película ha sido presentada a los Goya, ¿Qué supondría para ti que una película en la que has trabajado fuera nominada a estos premios?

El mero hecho de que nos hayan llamado para poder presentarla, eso ya es lo más increíble de este proyecto. Cómo te he dicho al principio, para mí fue extraordinario poder interpretar el papel de Paz. Pues tú imagínate todo lo que ha venido después. Cuando me dijeron que iba a los Goya, yo ya no podía pedir más.

Hay que ser realistas, ahora mismo en el mercado del cine hay películas de mucho presupuesto, no es nuestro caso. Es muy difícil optar a un premio. Yo ya el premio lo tengo. Nuestro equipo tiene ya el premio porque estamos tan ilusionados… Pero si llegara o se diera la casualidad de que fuéramos nominados en alguno… Pfff, no te sé decir creo que nos volveríamos locos todos. Sería un reconocimiento inmenso para todos. Sea cual sea la categoría, porque “Namida” es de todos.

¿Qué crees que va a aportar la película a la sociedad, en un momento como el actual, donde la violencia de género está tan presente?

Me gustaría que la gente reflexionara. Viéndola y después de verla. Que pararan un momento en sus vidas y reflexionaran sobre todo tipo de violencia, porque lo que te he dicho, como personas dejamos de ser personas. Este mundo nunca va a ser perfecto pero eso sí podemos evitarlo. Hay cosas que no se pueden evitar, pero la violencia se puede evitar si queremos.

Hablando de este caso, es que a mí me tira mucho lo de mamá. Yo como mamá, por favor, por los niños. Que la pareja no se lleva bien, hay mil maneras: asistir a un psicólogo, hay ayudas… ¿Que no se puede solucionar? Pues mira, una separación o lo que sea. Pero nunca llegar tan lejos, por ellos y por nosotros.

Es una película muy realista que no va a dejar indiferente a nadie. No es una historia ficticia, sino que pasa, está a la orden del día. Una de las cosas que tiene “Namida” es que te engancha por eso, es una realidad: es que esta señora, este señor y esta niña están en algunos hogares de España.

Por último, dame como mínimo tres razones por las que debo ir  ver esta película.

En primer lugar, soy salmantina y orgullosa de ello. Estoy muy orgullosa de que “Namida” está grabada íntegramente en Salamanca. Por ese motivo, porque nuestra ciudad es preciosa, la gente debería apoyarnos e ir a vernos.

Después porque es un tema que considero actual, y creo que nos vendría bien a todos reflexionar, ya no porque nos pase a nosotros sino porque podemos tener gente alrededor y hay que valorarlo.

En tercer lugar, creo que es una película apasionante y además, debemos apoyar al cine español. La directora, Alba, y el elenco, todos muy jóvenes. Me parece mentira que, con los medios que hemos tenido haya quedado un resultado tan bueno. Cuando he visto el resultado final he dicho: a esta gente joven hay que pegarle un impulso.

La verdad que hacer una conclusión del café de hoy es muy difícil. Muy difícil porque he aprendido tantas cosas que no sabría ni por dónde empezar.

Lo primero de todo que, como decía al principio la cita de Paulo Coelho, es necesario no abandonar nunca los sueños, porque yo me pregunto: ¿qué habría sido de Yolanda si no hubiera hecho clic en aquel taller de microteatro? Puede que nunca hubiera llegado hasta donde está ahora o puede que sí, eso nunca lo sabremos. Lo que está claro es que si ha llegado es porque se lo merece.

Lo segundo, el gran trabajo que hay detrás de cualquier proyecto audiovisual, y más aún cuando los medios y el presupuesto son escasos y tienes que buscarte las habichuelas para poder seguir adelante. Pero si algo está claro es qDSC_0471ue con ganas, tesón e ilusión todo se puede lograr, y para la muestra, un botón.

En tercer lugar, que la violencia de género es un mal mayor que nos afecta a todos. Y digo a todos porque todos somos responsables de erradicarla. No basta con mirar para otro lado como si con nosotros no fuera la cosa, y no es necesario vivirla para sentirte parte de ella. Entre todos debemos denunciar a quien la práctica y ayudar a quien la sufre.

Y lo cuarto, último y más importante: Yolanda eres fantástica. Gracias por tu amabilidad y cariño. Gracias por enseñarme que los sueños se cumplen cuando menos lo esperas y que las cosas llegan si se trabajan en ellas. Si antes tenía curiosidad por ver “Namida”, ahora mis ganas se han multiplicado por mil. Ojalá lleguéis aún más lejos de lo que estáis llegando con este gran proyecto, y ojalá sigas cosechando éxitos como hasta ahora. Porque en tu mirada y en alguna que otra lágrima de emoción, he visto todo lo que supone para ti la interpretación.

Y así es como una tarde de jueves aprendí que con un simple clic, la vida cambia y te lleva hasta donde nunca imaginaste: hasta “Namida”.

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